Con sangre escribo estas líneas, amores que se van y se marchitan, anhelos no cumplidos y en el soplido primaveral solo se va tu recuerdo en un bohío y sin ruidosos adjetivos te vas me dejas perdido, camino sin camino creándolo con los hilos que rompimos y buscar con quién unirlos, en la soledad me susurra tu suspiro y en el aire tus moléculas piden estar conmigo, y si es necesario compartir dos escenarios con actores de tercera pues me largo, y si algún día me ves no me recuerdes lo ignoto debajo de tu vestido que quería estar conmigo pero lo has impedido, no pudimos ser uno solo por los siglos, ahora queda compartir trozos sin sitio, en la cueva de las maravillas descubrí la humedad de tu ser buscando condominio con mi mejor huésped, en el césped sin podar de las tristezas y esos deseos como estrellas que sin brillo se pasean con destreza, buscando ocultar su carencia siendo escritas, buscando con quién hablar siendo entendidas, y no se que hacer con estas ansias de recorrer, el Niágara sin ropa y solo beber de tu ser, de ese corazón partido sin latidos, de desgarrarme más si eso es posible, masoquismo puro y cruel, y mi dolor solo es interpretado por el papel, que con excelencia recuerda mis palabras inmortalizándose, y solo te digo princesa, espero si la felicidad hayas, que no se olvide de recordarme porque yo no la encontré.