12 (Tercera parte)
Y una pequeña escolta de la princesa estaba en su encuentro, Dameron toma todas las precauciones necesarias. Su mano derecha estaba en su espada e intenta de relajar el cuerpo, Melek finge tranquilidad y los demás soldados estaban tensos; el príncipe se acerca con amabilidad:
- Buenos días.. princesa Safiya - y se inclina y besa sus delicadas manos. La chica era muy hermosa, de tez blanca con unas pequeñas pecas en su rostro; con cabello rubio hasta la cintura y de ojos café claro con una mirada felina, su forma de mirar era intimidante; excepto para Melek, pero ella miraba de manera especial a Dameron; esté no le prestaba atención:
- Buenos días.. príncipe Dameron - con una ligera sonrisa - los estábamos esperando.. vamos - los invita a ir al reino
En el camino Melek observa atenta a Dameron y a la princesa Safiya, él le estaba informando sobre la situación y ella dice:
- No lo puedo creer.. en cuanto tiempo va a estar aquí - expresa preocupada Safiya
- Aproximadamente un mes - exclama Dameron
- ¿Y ella quién es? - refiere a Melek y mira a la muchacha de pies a cabeza
- Ella es Melek.. del planeta tierra - sonríe tiernamente
- ¿Y por qué está aquí? - pregunta
- El talismán de la mente la escoge a ella hace cinco años atrás, cuando se activó, la última vez fue hace dos mil años atrás.. y me condujo a su planeta.. al igual que.. - se queda callado
- Entiendo.. - exclama
- Los talismanes se activaron cuando el devorador de mundos se acerca; se está expandiendo como la peste, ya ha destruido cinco planetas y ahora va por el nuestro… - exclama Dameron preocupado
- Entiendo.. Mi padre va a querer pruebas irrefutables, traigo todo tipo de pruebas - sonríe Dameron que hizo reír a la princesa
Melek miraba a Dameron de reojo y después miraba al suelo del carruaje y sus manos. No podía creer que está en otro mundo y además tener que salvarlo, ya que no se puede salvar a sí misma. Ni pudo salvar a Nathaniel, en el pasado ni a sus padres cuando era niña; su respiración se entrecortaba al recordar las desgracias de los últimos años. No podía respirar con la culpa, su mano aprieta una de sus piernas como si quisiera arrancar su piel con sus propias uñas. La única verdad es que ella no puede controlar todo, la chica se imagina si tuviera control de las situaciones y de los sucesos de su vida, lo único que no entendía es.. ¿Por qué ella?, supongo que no importa eso ahora.
Siente que el carruaje se detiene y ella se levanta para ver lo que ocurre, el príncipe le sostiene su brazo:
- ¿Qué haces? - exclama inquisitivo y a la vez serio
- Voy a ver.. me puedes soltar.. - exclama Melek enojada
- Tenemos otras costumbres y esto es una falta de respeto - exclama miedoso - y no quiero que te ocurra nada malo, Melek
- No me va a ocurrir nada.. así que suéltame - intenta de soltarse y Dameron le aprieta con más fuerza - oye suéltame
- Acaso no escuchaste lo que digo.. ahora hay que actuar con cautela, en la guerra y la diplomacia hay un solo paso.. - exclama el joven - por favor siéntate.. yo entiendo que es difícil para ti, pero no ahora
- Uf.. está bien - se sienta y en ese momento sigue con su recorrido, Dameron estaba preocupado por los cambios repentinos de humor de Melek, pero el talismán la escogió; se imaginaba que por algo, los misterios de la existencia y de la vida; el mundo de donde Melek no entienden que la vida es algo importante y que es más, que trabajar, competir entre ellos mismos. Ese tipo de pensamientos lo destruye lentamente, y que las personas sólo quieren morir; eso no es vida. Recuerda a su profesor de historia que tenía el reino, él le relata que los humanos no buscan el propósito de sus vidas, y si alguien lo hace son marginados como si la vida espiritual no fuera importante. Eso no los hace diferentes a los humanos, que provienen del mismo origen; no tenemos que ser arrogantes ni mucho menos decir que somos superiores a ellos, nosotros somos hijos de los errores y de los fracasos. Una voz interrumpe sus pensamientos:
- ¿Por qué sonríes? - pregunta Melek a Dameron
- No es por nada.. - mira a Melek con dulzura
- En serio.. - lo mira - no sabía que mis compañeros me escondían secretos.. es bueno saberlo - sonreía
- No es eso Melek..nada de eso - sonríe
- No te preocupes.. después me cuentas - sonríe Melek y sigue mirando el paisaje que era salvaje, pero muy hermoso y le genera una paz que jamás va a encontrar en otro lugar en la tierra. Y el joven príncipe la mira con tanta dulzura, que parece que se derrite de amor por ella. La princesa Safiya se percata y no dice nada al príncipe. Finalmente llega a las puertas del palacio y toda la comitiva sale de las carrozas, la princesa Safiya que encabeza el grupo; con gran seguridad camina por el palacio y Dameron la sigue en conjunto a Melek, llega a la sala del trono en donde espera a que le dieran permiso para que puedan entrar y finalmente entran y su interior había una gran mesa en donde se ve un gran banquete, y en el fondo estaba el trono del rey y de la reina, Safiya se adelanta y se acerca a su padre que le dice:
- Padre.. - con la cabeza agachada
- Hija.. - habla con una voz profunda que era intimidante, para los soldados
- Majestad.. ya llegaron las visitas - exclama la joven princesa y el rey se levanta y Melek pudo verlo, era un hombre grande de cabellera rojiza; al parecer poseía una gran fuerza y mira con fiereza a Dameron, y Melek mira a Dameron y después al rey; tenía la sensación que había un cierto conflicto entre ellos y dice:
- ¿Tú? - musita enojado a Dameron que se acerca rápidamente para darle un puñetazo en el perfecto rostro del príncipe, la magnitud del golpe le provoca una pequeña hemorragia en la nariz y Melek se asusta tanto que se acerca a Dameron:
- ¿Pero por qué?.. - le pregunta y el rey le grita
- LEVÁNTATE PRINCESITA.. -vociferando el rey e intenta de dar un golpe hacía Dameron y Melek se interpuso y con el talismán pudo detener el golpe del rey con la mano estirada y este la mira sorprendida - Niña..¿Cómo? - y la joven lanza al rey a través de la sala del trono y todos quedan sorprendidos, Dameron se acerca a ella y le dice al oído:
- Vamos Melek - le dice suavemente - déjalo - y le baja la mano, está lo hizo y se desmaya en los brazos de Dameron - despierta por favor - y después de veinte minutos la joven despierta y se toca la cabeza y lo primero que ve fueron unos ojos con matices verdes y celestes que la miraban fijamente:
- ¡Auch!.. Tengo una gran jaqueca - se queja
- Melek.. - le tocaba el rostro con delicadeza - Estás bien - sonreía
Continuará…
- Buenos días.. princesa Safiya - y se inclina y besa sus delicadas manos. La chica era muy hermosa, de tez blanca con unas pequeñas pecas en su rostro; con cabello rubio hasta la cintura y de ojos café claro con una mirada felina, su forma de mirar era intimidante; excepto para Melek, pero ella miraba de manera especial a Dameron; esté no le prestaba atención:
- Buenos días.. príncipe Dameron - con una ligera sonrisa - los estábamos esperando.. vamos - los invita a ir al reino
En el camino Melek observa atenta a Dameron y a la princesa Safiya, él le estaba informando sobre la situación y ella dice:
- No lo puedo creer.. en cuanto tiempo va a estar aquí - expresa preocupada Safiya
- Aproximadamente un mes - exclama Dameron
- ¿Y ella quién es? - refiere a Melek y mira a la muchacha de pies a cabeza
- Ella es Melek.. del planeta tierra - sonríe tiernamente
- ¿Y por qué está aquí? - pregunta
- El talismán de la mente la escoge a ella hace cinco años atrás, cuando se activó, la última vez fue hace dos mil años atrás.. y me condujo a su planeta.. al igual que.. - se queda callado
- Entiendo.. - exclama
- Los talismanes se activaron cuando el devorador de mundos se acerca; se está expandiendo como la peste, ya ha destruido cinco planetas y ahora va por el nuestro… - exclama Dameron preocupado
- Entiendo.. Mi padre va a querer pruebas irrefutables, traigo todo tipo de pruebas - sonríe Dameron que hizo reír a la princesa
Melek miraba a Dameron de reojo y después miraba al suelo del carruaje y sus manos. No podía creer que está en otro mundo y además tener que salvarlo, ya que no se puede salvar a sí misma. Ni pudo salvar a Nathaniel, en el pasado ni a sus padres cuando era niña; su respiración se entrecortaba al recordar las desgracias de los últimos años. No podía respirar con la culpa, su mano aprieta una de sus piernas como si quisiera arrancar su piel con sus propias uñas. La única verdad es que ella no puede controlar todo, la chica se imagina si tuviera control de las situaciones y de los sucesos de su vida, lo único que no entendía es.. ¿Por qué ella?, supongo que no importa eso ahora.
Siente que el carruaje se detiene y ella se levanta para ver lo que ocurre, el príncipe le sostiene su brazo:
- ¿Qué haces? - exclama inquisitivo y a la vez serio
- Voy a ver.. me puedes soltar.. - exclama Melek enojada
- Tenemos otras costumbres y esto es una falta de respeto - exclama miedoso - y no quiero que te ocurra nada malo, Melek
- No me va a ocurrir nada.. así que suéltame - intenta de soltarse y Dameron le aprieta con más fuerza - oye suéltame
- Acaso no escuchaste lo que digo.. ahora hay que actuar con cautela, en la guerra y la diplomacia hay un solo paso.. - exclama el joven - por favor siéntate.. yo entiendo que es difícil para ti, pero no ahora
- Uf.. está bien - se sienta y en ese momento sigue con su recorrido, Dameron estaba preocupado por los cambios repentinos de humor de Melek, pero el talismán la escogió; se imaginaba que por algo, los misterios de la existencia y de la vida; el mundo de donde Melek no entienden que la vida es algo importante y que es más, que trabajar, competir entre ellos mismos. Ese tipo de pensamientos lo destruye lentamente, y que las personas sólo quieren morir; eso no es vida. Recuerda a su profesor de historia que tenía el reino, él le relata que los humanos no buscan el propósito de sus vidas, y si alguien lo hace son marginados como si la vida espiritual no fuera importante. Eso no los hace diferentes a los humanos, que provienen del mismo origen; no tenemos que ser arrogantes ni mucho menos decir que somos superiores a ellos, nosotros somos hijos de los errores y de los fracasos. Una voz interrumpe sus pensamientos:
- ¿Por qué sonríes? - pregunta Melek a Dameron
- No es por nada.. - mira a Melek con dulzura
- En serio.. - lo mira - no sabía que mis compañeros me escondían secretos.. es bueno saberlo - sonreía
- No es eso Melek..nada de eso - sonríe
- No te preocupes.. después me cuentas - sonríe Melek y sigue mirando el paisaje que era salvaje, pero muy hermoso y le genera una paz que jamás va a encontrar en otro lugar en la tierra. Y el joven príncipe la mira con tanta dulzura, que parece que se derrite de amor por ella. La princesa Safiya se percata y no dice nada al príncipe. Finalmente llega a las puertas del palacio y toda la comitiva sale de las carrozas, la princesa Safiya que encabeza el grupo; con gran seguridad camina por el palacio y Dameron la sigue en conjunto a Melek, llega a la sala del trono en donde espera a que le dieran permiso para que puedan entrar y finalmente entran y su interior había una gran mesa en donde se ve un gran banquete, y en el fondo estaba el trono del rey y de la reina, Safiya se adelanta y se acerca a su padre que le dice:
- Padre.. - con la cabeza agachada
- Hija.. - habla con una voz profunda que era intimidante, para los soldados
- Majestad.. ya llegaron las visitas - exclama la joven princesa y el rey se levanta y Melek pudo verlo, era un hombre grande de cabellera rojiza; al parecer poseía una gran fuerza y mira con fiereza a Dameron, y Melek mira a Dameron y después al rey; tenía la sensación que había un cierto conflicto entre ellos y dice:
- ¿Tú? - musita enojado a Dameron que se acerca rápidamente para darle un puñetazo en el perfecto rostro del príncipe, la magnitud del golpe le provoca una pequeña hemorragia en la nariz y Melek se asusta tanto que se acerca a Dameron:
- ¿Pero por qué?.. - le pregunta y el rey le grita
- LEVÁNTATE PRINCESITA.. -vociferando el rey e intenta de dar un golpe hacía Dameron y Melek se interpuso y con el talismán pudo detener el golpe del rey con la mano estirada y este la mira sorprendida - Niña..¿Cómo? - y la joven lanza al rey a través de la sala del trono y todos quedan sorprendidos, Dameron se acerca a ella y le dice al oído:
- Vamos Melek - le dice suavemente - déjalo - y le baja la mano, está lo hizo y se desmaya en los brazos de Dameron - despierta por favor - y después de veinte minutos la joven despierta y se toca la cabeza y lo primero que ve fueron unos ojos con matices verdes y celestes que la miraban fijamente:
- ¡Auch!.. Tengo una gran jaqueca - se queja
- Melek.. - le tocaba el rostro con delicadeza - Estás bien - sonreía
Continuará…
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