10:40 AM. Lunes 03 de Enero.

Connor

El sonido incesante de la cafetera y los ladridos de Dan lograron levantar a Connor, quien con enfado se paró de la cama; con pereza, arrastrando los pies, llego hasta la cocina donde la cafetera que le había regalado su hermano Sam, para su cumpleaños número veinte, la cual desde hace un mes aproximadamente había estado haciendo ruidos extraños.

Con un suspiro tomó su tasa con el café humeate y fue hasta la sala descolgando el teléfono alambrico.

—tiene 3 mensajes—anunció la voz de una mujer, para luego reproducir el primer mensaje,— Connor ya vi tu Imail, ya reserve una cita a las tres, para la próxima semana—decía la primera persona, un socio bastante estrecho de "DC internacional"  y amigo del padre de Connor, Dario Cooper.

Luego hubo una pausa de cinco minutos, para luego pasar el siguiente mensaje.

—ya tengo la agenda de este mes, llega temprano para que te la pase, si?—esta vez era el secretario de Connor, Tomás Blake, un hombre de 27 años quien era la mano derecho de Connor y su mejor amigo, después de todo habían compartido mucho en la Universidad.

—papá nos espera mañana a las tres de la tarde para hablar de "eso"... Ya tenemos los papeles, iré en la tarde a dejartelos a ver que encuentras tú—dice una voz distinta a la anterior, a quién reconoció de inmediato, era su hermano Samuel, por la hora de seguro estaba de camino a la empresa en el centro de la cuidad, otra sucursal de "Dc internacional".

Tomando otro sorbo de café se fue hasta el patio abriendo la puerta para que su perro, Dan, entrará; mientras el animal olisqueaba el lugar, como todas las mañanas, Connor con monotonía sirvió la comida para Dan, junto al agua.

Mientras el perro comía, Connor prendió la televisión acostándose en el sofá y mirando las noticias.

Típicas noticias mañaneras aburridas, al parecer hoy iba a ser el día mas frío del año, -3°c que iban a calar los huesos de las personas.

—joder—susurro Connor bostezando, como siempre se había levantado media hora antes de lo que su alarma sonará y no tenía nada que hacer, aparte de mirar la televisión.

Repentinamente un dolor en el lóbulo frontal lo hizo despertar, llevando sus manos a la cabeza se quejo con molestia, controlando su respiración; cuando el dolor se prolongo dolorosamente el hombre se paro del sillón hasta llegar a la mesa de centro, donde estaban las pastillas para la migraña.

Con rapidez tomó una tragando  con poca dificultad, luego volvió a tomar asiento sintiéndose mejor; cuando Dan comenzó a ladrar para que lo sacaran de la casa.

Connor suspirando, con pasos lentos abrió la puerta al patio dejando que su perro saliera.

La alarma de su celular le aviso que era hora de vestirse, con pereza y con un pequeño malestar en la cabeza fue hasta el baño preparando el agua caliente; luego fue hasta su armario eligiendo la ropa que usaría ese día, siempre desde joven se había preocupado de su presentación personal, pues le gustaba estar limpio y bien vestido.

Ese día eligió una camisa con rayas negras, un suéter azul con mangas, pantalones negros ajustados, zapatos negros bien lustrados, de una marca bastante cara.

Se adentro al baño sintiendo su cuerpo y mente relajarse al sentir como el agua caliente se deslizaba por sus hombros, tomando el Shampoo de siempre se lo aplicó sin prisa, frotando el producto por el cabello; una vez conforme se colocó debajo del chorro de agua sacando el Shampoo, hizo lo mismo con el acondicionador y una vez listo salió de la bañera envolviendo su cuerpo con una toalla.

Mirando el espejo su cuerpo completo en el baño suspiró, el cabello más o menos largo y negro, una barba descuidada, el cuerpo delgado, aunque trabajado, pues de vez en cuando corría por las mañanas con Dan.

Aun así los años se reflejaban en sus ojos cansados, algunas arrugas por ahí, ya no tenía tanta vitalidad como hace unos años, cuando la vida parecía una experiencia excitante y los misterios del mundo se presentaban como un reto.

Ahora más bien estaba cansado, ¿debería darse esas vacaciones que tanto tiempo había planeado?, se imaginaba en una playa idílica, llenó de lujos y paz, donde su padre y Sam no pudieran molestar; quizás podría dejar a Dan con Samuel o con Estela, la vecina de al lado.

Saliendo de sus pensamientos se colocó algo de perfume, bastante varonil, de agradable olor chocolate y menta.

Vistiéndose salio del baño, tomando sus cosas, salió de su casa y prendió su automóvil, un Chevrolet negro SS, para luego conducir a su empresa, en el transcurso escuchando algo de rock.

Al salir del auto se topó con Tom, quién al verlo se dirigió hasta él con una sonrisa amable.

—estaba por llamarte, como estuvo tu fin de semana?—preguntó tranquilamente, mientras daba un sorbo a su chocolate caliente matutino.

—igual que siempre, salí a correr un rato con Dan, ah y mi hermano me dijo que vendría para hablar del cumpleaños de nuestro padre—dijo Connor cerrando el largo abrigo que llegaba, pues el frío fuera del carro estaba insoportable.

—bien, le avisare de inmediatos a la recepcionista para que lo deje pasar—dice el castaño, ajustando sus lentes, para luego entrar al edificio.

El edifico constaba de cinco pisos, contando la recepción, era una empresa bastante renombrada, pues entre los medios y Marketing la calidad de telas, producción, diseño estaba en el TOP #10 de mejores ventas.

Y ya estaban exportando a Japón, Korea y china, países de potencia Mundial, donde sólo las mejores marcas se vendían.

Entrando a su oficina se dejó caer en la silla giratoria, mirando una foto de Sam, Dan y él cuando eran jóvenes; sonrió quitando algo de polvo que se había acumulado en el fin de semana.

El día transcurrió normal y agotador, como presidente de esa sucursal debía asegurarse de que todo estaba bien y de los problemas de sus empleados.

Connor, cómo hombre ocupado no tenía tiempo para descansar o comer algo; todo el tiempo se lo pasaba revisando el número de producción, el número de ventas del año pasado, el tiempo de producción, hablando con los otros socios que vendían o podían vender mercancía.

—señor, su hermano esta acá —anuncia la recepcionistas tocando antes de entrar y sonriendo falsamente,—les traigo algo?—preguntó amable, Samuel entrando con galantería palmeó el hombro de Evelyn y se sentó al frente de Connor con esa sonrisita tranquila.

—un café estaría bien—dice Sam sonriendo en dirección a la mujer, quien asintió saliendo de la oficina.

Samuel Cooper, el hijo menor de Dario, estudió Contabilidad en una Universidad prestigiosa de Inglaterra, como heredero de las empresas "DC international" se hizo cargo de la segunda sucursal y rápidamente triunfo como su hermano; Sam se caracterizaba por tener una personalidad amable y tranquila, aunque bastante distante. En su juventud había sido un rebelde sin causa, probando tanto mujeres como hombres y había causado bastantes disgustos a su padre, pero Connor y él siempre se apoyaron mutuamente, incluso en esa época tan difícil.

El menor de los Cooper era el más atractivo de todos, pues había sacado los ojos celestes de su madre, Hana y el cabello rubio ceniza de su padre Dario; poseía  facciones varoniles, como la mandíbula cuadrada, los pómulos pronunciados. Labios delgados y rosados, junto a una sonrisa que podría enamorar al más heterosexual.

—Connor!, mi hermano favorito!—chilló Sam sonriendo brillante, dejando montón de papeles encima de la mesa de madera y apoyando sus codos en éstos,—esto te va a interesar—dice el rubio, con una sonrisa astuta.

—que tanto?—preguntó curioso Connor tomando la carpeta principal, la cual era de color amarillo y tenía un titulo estúpidos: "yo y Connor en Disneyland"; abriéndolo leyó el contenido.

¿Traficantes de drogas?, ¿que tenía de interesante?.

—que hay de interesante en esto?—cuestionó el mayor con el ceño fruncido, Samuel sacándole la lengua se acomodo el cabello con cuidado.

—lo interesante no es el caso, pequeño Connor, lo interesante será atraparlos, el 05 de enero planean reunirse en una fiesta de caridad a las 13:40 P.M y papá nos quiere dentro—dice Sam mostrando las imágenes del lugar, como las invitaciones a la fiesta.

Connor rascando su nuca miró a su hermano con desinterés, la verdad no se le hacía nada de emocionante el filtrarse en una puta fiesta llena de traficantes; prefería pasar ese día en su casa viendo " Dr.House" en Netflix y comiendo cereales de color.

—mira Sam, siento desepcionarte, pero por esta vez paso, eh estado muy estresado y quiero darme unas vacaciones, ya sabes a una playa muy lejos de aquí—dijo Connor, separándose de la mesa y mirando su agenda.

—Connor, Connor, Connor, parece que los años te han vencido hermano, antes te emocionabas atrapando tipos asquerosos que mataban en los prostíbulos, ¿que te ha pasado?, vamos esto podría ser emocionante!—dice el rubio con un puchero, intentando convencer a su hermano.

—Sam eh perdido la emoción de hacer esto desde hace años, ya no quiero meterme en las mierdas de papá, de verdad quiero tomarme un descanso de todo—suspiró Connor, masajeando su cabeza, el dolor había vuelto.

—vamos, una fiesta, drogas, mujeres, alcohol, quizás es lo que necesitas hermano—dice el rubio; ¿quizás era verdad?, ¿necesitaba más emoción en su rutinaria vida?, Sam ah pesar de ser joven sabía muy bien convencer y salirse con la suya.

—bien, hagamoslo, pero será la ultima vez—acepto Connor, rindiéndose, ¿que tan malo podría ser?.

—yay!, ten te dejo todos los papeles para que los revises, ve a buscarme ah las 12:00, se puntual, llámame!—grita Sam antes de salir de la oficina.

Genial, ahora tenía planes para su fin de semana y dejaría su suave sillón y su noche ideal por ir detrás de unos traficantes.

—veamos que tenemos acá —dice Connor tomando la carpeta de las personas involucradas; entre ellas hombres viejos, hombres gigantes, quienes seguramente llevarían armas y mujeres sexys. Una de ellas le llamo la atención, una mujer de nombre Ariel Devine, de cabellos rubios claros, ojos avellana, unas mejillas rosadas y redondas, los labios delgados y pálidos. Era hermosa.

Pero su apariencia triste y melancólica fue lo que llamo la atención de Connor, tenía los ojos cristalizados, como si en cualquier momento se pusiera a llorar. Leyó toda su información, edad, fecha de nacimiento, lugar de nacimiento, pero era bastante sospechoso, algunas cosas no coincidían del todo; como el hecho de que estaba casada con un tipo llamado Víctor Johns, siendo que la mujer solo tenía 18 años.

Suspirando anotó el nombre de la mujer, más tarde en su casa investigaria sobre ella y algunos otros tipos, quienes de seguro tenían nombres falsos.

—señor su café—dice Evelyn entrando a la habitación, mirando para todos partes.

—Sam ya se fue, sólo dejalo aquí —indica Connor con el dedo índice, la mujer hace lo que le indican y sale de nuevo, dejando al hombre totalmente sólo.

Connor de nuevo se sumergió en su trabajo, sin descansar o pestañar si quiera, sabía que aun le quedaba bastante trabajo que hacer antes de irse a su casa; aunque Connor no lo admitiera en voz alta no quería volver a su "hogar", por una parte no había nadie que lo esperará ahí, nadie que lo recibiera con los brazos abiertos, nadie que le preguntará como estuvo su día.

Connor siempre había sido solitario y retraído, no era de tener muchos amigos, más que Tomás no tenía a alguien que llamar íntimo.

—Connor estas bien?—preguntó Tom entrando a la oficina, prendiendo las luces,—ya son mas de las diez y no has comido nada, vamos, te invitó al restaurante de comida china—dice el castaño sonriendo, Connor sentía que Tom le ocultaba algo, ¿que podría ser?.

—te pasa algo?—pregunta Connor mirando a su amigo, quien nervioso ajusta sus lentes; una acción muy típica de Tom.

—no, nada, sólo... Hable con tu hermano—dice con las mejillas rojas y bastante nervioso, ¿su mejor amigo y su hermano hablando?, eso no sonaba nada bien, porque sólo se le ocurría un tema del cual podrían hablar: él.

Nota de la autora: que tal? :) les gusto el primer capítulo?, les da pereza leer 2000 palabras? XD.

Haber los capítulos se publicaran cada dos semanas, porque los capítulos son largos y si escribo mucho me duele la mano (tengo tendinitis) todos los caps están editados, pero si ven algún error me avisan.

Cualquier parecido a otra historia, que sea plagio o adaptaplagio por favor avisar :).

Votos?, comentarios? 💕.


                                              -July:D.